domingo, 5 de octubre de 2008

Rosas caídas


Después de muchos meses de sequía tuvimos unos días lluviosos, y como consecuencia de ello un enorme rosal que era de una de mis bisabuelas y que ella llamaba "rosa té" terminó por el suelo.
Talvez porque la planta estaba grande o talvez por la cantidad impresionante de pimpollos que tenía, la cuestión es que me puse a cortar las rosas que no se habían dañado, a la espera que mi marido le hiciera un soporte más fuerte, y junté casi 4 docenas de rosas, que llevé al cementerio para mi papá, mis abuelos y por supuesto, para su antigua dueña.

3 comentarios:

NaDiA dijo...

Si... qué alegría produce la lluvia después de tanto tiempo.
Hermosas las rosas, con un buen destino.
Besotes.

ANY dijo...

Preciosas las rosas,bellisimo el color me imagino su fragancia,que rico,el gorro impecable super,cariñitos para las 2,besitos.

SUSANA dijo...

hola MARIA ROSA :
La lluvia "casi" siempre es una bendicion para nuestros jardines,sobre todo cuando es tranquila sin vientos o piedras y seguramente esa rosa se va a recuperar.Pasé a visitarte te dejo un beso ,muy lindo el gorro.